Muchas instituciones enfrentan problemas de salud mental de las personas que pertenecen a ellas o tienen a su cargo.
Por ejemplo, las escuelas y colegios deben tomar decisiones en relación con los problemas de salud mental de sus estudiantes. Por supuesto, si no hay un psicólogo residente, los profesores y directivos deben al menos poder distinguir cuándo un estudiante necesita de ayuda profesional. No obstante, hacer diagnóstico psicológico necesita siempre de profesionales de área.